Tratemos la menopausia de manera natural
Todas tenemos esa época de la vida en que todo parece tranquilizarse, los hijos toman su camino, la economía familiar se estabiliza, y todo parece
Todos los seres vivos, humanos, animales y plantas, tenemos la capacidad de sentir las energías que nos rodean y más allá. Este es un conocimiento innato que la mayoría no sabe que lo posee.
Se le llama Radiestesia al arte de percibir y traducir de forma consciente, la capacidad para captar las radiaciones, tanto de los seres vivos como de los objetos y los espacios.
El péndulo para la radiestesia es el instrumento que usamos para poder interpretar a través de unos códigos personales, las respuestas a nuestras preguntas concretas.
El péndulo es un amplificador físico y un buen elemento para testar productos, comprobar y elaborar diagnósticos, encontrar agua, objetos o personas, armonizar los campos de energía de seres vivos, espacios y mucho más.
Sin embargo, su dominio exige más que desear manejarlo. En este contenido vamos a introducirte en su uso, el punto de partida previo a hacer un curso práctico.
En realidad, es un elemento bastante simple que tú mismo puedes construir. Es un objeto pequeño que permanece unido a la mano mediante un accesorio de enlace flexible, normalmente una cuerda o una cadena.
Existen factores (material, tamaño, formato, procedencia, historia…) a los que muchas personas les dan importancia. Sin embargo, lo principal es que sea simétrico respecto a su eje vertical y no excesivamente largo.
Si tienes un péndulo simétrico y después de aprender a manejarlo, podrás interpretar la información que aparece, cuando tienes un buen enfoque y haces las preguntas adecuadas.
Esta es la función principal del péndulo cuando se aplica a la radiestesia.
El punto de partida de su manejo es sencillo:
Todas tenemos esa época de la vida en que todo parece tranquilizarse, los hijos toman su camino, la economía familiar se estabiliza, y todo parece
Soy terapeuta y consteladora familiar y mis inicios profesionales en lo holístico y natural se remontan al año 1990, cuando empecé a trabajar en un
Todas somos especiales, tenemos una fuerza interna increíble, aunque a veces no seamos conscientes de ella o no sepamos sacarle el máximo provecho. Cabe destacar